En la mañana del viernes 26 de abril de 2.024 y a las 12 horas, en el Teatro Manuel España de Las Lagunas, de Mijas, ha tenido lugar la concesión de las Medallas de Oro de la Provincia de Málaga.
La mañana empezaba agradable, cielo azul, limpio, sin nubes. En el acceso al teatro daba pie al encuentro de los numerosos asistentes. Autoridades políticas, diputados autonómicos y nacionales, algún senador, Alcaldesa de Mijas, componentes de su Consistorio, representantes de la Diputación, Subdelegado del Gobierno central, Cuerpo Consular, militares junto con Guardia Civil, personal de Cruz Roja, personalidades de los diversos municipios provinciales y por supuesto miembros de la Policía Nacional, en representación de diversas localidades provinciales y la Asociación de Jubilados de la Policía de España (AJPNE).
El teatro demostraba encontrarse abarrotado y en el propio escenario se ubicaban los distinguidos, a nivel individual la cantante Pasión Vega y el futbolista Francisco Román Alarcón “ISCO” quien no puso estar físicamente en el teatro al estar concentrado con su equipo, el Betis, ante la celebración del encuentre contra el Sevilla.
Por otro lado fueron condecorados, como entidades, la fábrica de Cervezas San Miguel, con cerca de 60 años de presencia en esta capital, la Cruz Roja, con cerca de presencia en la ciudad desde cerca de 150 años y finalmente se entregaba al Cuerpo Nacional de la Policía, que este año ha celebrado sus 200 años de existencia.
La condecoración y el diploma de la concesión fueron recibidos por el Comisario Principal, como Jefe Provincial de la Policía en Málaga, Don Enrique Barón.
Dirigió unas palabras de agradecimiento a la Diputación Provincial de Málaga y a los diversos estamentos que dieron su apoyo a este concesión. Hizo diversas referencias a detalles de actuaciones y recalcando que desde el propio comienzo de la actual policía ya es sus instrucciones, normas, se indicaba la labor de protección de la gente de bien, hacerse con los infractores, evitar que se repitan sus violencias y robos y afianzar la tranquilidad y la seguridad pública.
Finalizado el acto, pasadas casi dos horas, en la carpa ubicada en la entrada al teatro se ofrecía un refrigerio, acompañando bebidas, por supuesto de San Miguel, así como un variado tapeo. Momentos para saludar a compañeros, amigos de la Guardia Civil y de diversos círculos de diversas actividades, empresariales, políticos y publico en general.
Pero poco a poco el cielo se cubría de nubes, sin amenazar lluvia, pero esconda el cielo y evitando disfrutásemos de su calor. Empezaba a soplar un viento que traía bajada de temperatura. Era hora de despedirnos y, como dice el refrán, cada mochuelo a su olivo.